Seguro que has escuchado alguna vez que es bueno beber agua para la resaca o que bebe agua elimina la resaca. Pues beber agua después de ingerir alcohol no es tan efectivo como pensamos habitualmente. Puede suavizar los efectos del alcohol, pero no es algo significativo.
La única forma práctica de evitar una resaca es beber menos alcohol. Con esta premisa, y después de algunas investigaciones al respecto, científicos de Países Bajos y Canadá determinaron, tras estudiar las reacciones en un grupo de más de 800 estudiantes, que beber agua a posteriori para paliar los efectos del alcohol no es del todo efectivo.
Sin embargo, el agua aún puede ayudarnos a combatir la resaca de otra forma.
Beber agua para la resaca: el truco está en alternar con el agua
El truco está en alternar el consumo de bebidas alcohólicas con tragos de agua. Lo que buscamos con esto va mucho más allá de que no se produzca la deshidratación, como se suele creer a causa de que el alcohol es diurético, lo que significa que nos hace orinar mayor cantidad de veces. Pero se trata, más bien, de que el cuerpo sea capaz de procesar los derivados tóxicos que contiene el alcohol. Nuestro hígado transforma el alcohol en una sustancia química tóxica llamada acetaldehído (o etanal), y el agua nos ayuda a tratarlo.
Como suele pasar en estos casos, y como es nuestra obligación, no podemos dejar pasar la oportunidad de advertir que la mejor forma de evitar resacas es disminuyendo el consumo de alcohol, porque lo que sí está comprobado es que existe una relación directa entre la cantidad que ingerimos y el tamaño de nuestra resaca.
¿Quieres probar este truco? Lleva contigo una botella de agua o equipa tu casa con un dispensador de agua de calidad para mantenerte hidratado.