Agua de mar

Son muy contradictorias las informaciones que podemos encontrar sobre el hecho de usar el agua de mar para beber. Algunas apuestan por los beneficios que aporta y otras alertan de sus peligros. Vamos a descifrar cuáles son las ventajas e inconvenientes de hacerlo y las razones. Beber agua de mar es posible y positivo si se siguen algunas instrucciones.

El principal problema de beber agua de mar es su concentración en sal (que es de 36 gramos de sal por cada litro de agua). Como la proporción de nuestro organismo es menor, si ingerimos agua de mar nuestros tejidos liberan agua para compensar este desequilibrio. Esto hace que nos deshidratemos, ya que estamos usando el agua necesaria para nuestro cuerpo.

Sin embargo, el agua de mar también tiene multitud de beneficios. De hecho, algunos autores defienden que mejora nuestra calidad de vida. Sin ir más lejos, el agua marina contiene todos los elementos de la tabla periódica. Es alcalinizadora del medio interno, nutriente celular, reconstituyente, dentrífico, colutorio, laxante, purgante, desinfectante y cicatrizante para infecciones de boca, y neutralizadora de acidez de estómago. Nos puede ayudar a limpiar nuestro intestino y colon, es diurética y rebaja la presión.

¿Puedo beber agua de mar directamente?

Para consumir agua de mar hay que seguir ciertas indicaciones. No podemos beberla en grandes cantidades, sino en pequeños sorbos. También podemos rebajarla con agua dulce y, de esta forma, poder consumirla normalmente. Asimismo, si la mezclamos con zumos de cítricos (limón, naranja, pomelo), su sabor queda camuflado y también la estamos haciendo isotónica, rebajándole la sal.

En cuanto a la sal, debemos recordar que se trata de sal marina, distinta de la refinada, que es la que no recomiendan los médicos.

Para tomarla, podemos comprarla en farmacias o bien sacarla directamente del mar. En este último caso, lo ideal es hacerlo fuera de la época de baños para evitar que esté contaminada. Aunque el agua de mar tiene la propiedad de descontaminarse de forma automática en varios días, es preferible asegurarse. Por ejemplo, zonas profundas, fuera del alcance de desagües. Las zonas rocosas suelen ser buenos lugares para ello.

Como curiosidad, os contamos que si calentamos el agua de mar por encima de 40º, esta pierde gran parte de sus propiedades.